Estos tres venerables ancianos llevan 2.000 años con pyme, atendiendo únicamente al mercado español y sin intención de expandirse, y están sufriendo una agresión globalizadora (en forma de tipo gordinflón inventado por una multinacional) que amenaza con destruirlos. ¡Basta ya! Reivindiquemos nuestras señas de identidad porque los Reyes Magos son:
- Símbolo de la multirracialidad, y nunca han tenido problemas de integración entre los tres.
- Un clásico fashion: su elegancia no pasa de moda.
- Imprescindibles: si no existieran, las vacaciones acabarían el día 2 en lugar del 6.
- Ecológicos: utilizan vehículos de tracción animal que con su estiércol contribuyen a fertilizar el suelo patrio (Nada de trineos que nunca hemos visto: camellos, que todos conocemos alguno).
- Muy sabios; de hecho, dominan, entre otras, la astrología, la alquimia, etc., mientras que Papá Noel sólo dice “Jou,Jou, Jooouu!”.
- Ejemplo de agradecimiento y buena educación al zamparse los dulces y beberse los licores que le dejamos.
Por si las razones anteriores no fueran suficientes, los Reyes Magos desempeñan además un papel fundamental, porque:
- Generan un montón de puestos de trabajos entre pajecillos, carteros reales y repartidores de caramelos en la cabalgata.
- Fomentan la industria del calzado y enseñan a los niños a limpiar las botas al menos una vez al año. Por el contrario. Papá Noel exige que se deje un calcetín, prenda proclive a la mugre.
- Mantiene en pie la minería del carbón en Asturias.
- Planifican concienzudamente su trabajo y se retiran discretamente cuando acaban la función.
- Tuvieron un papel destacado en la Navidad, según cuentan las Escrituras, mientras que Papá Noel es un personaje de ficción.
- Gracias a ellos se inventó el Roscón de Reyes.
Así que… ¡vivan los Reyes Magos!
|