Un gran futuro

Muchos son los problemas de este país que hay que resolver y no menos los que tenemos que prevenir para tratar de que no se produzcan. Politicos, economistas, cientificos y profesionales en general ,afinan sus conocimientos para corregirlos en lo posible y buscarles solución de una manera rápida, tomando decisiones que algunas veces no da lugar ni siquiera a que se desarrollen para volver a cambiarlas.

Sin embargo, hay una gran parte de ellos, que se olvidan de algo fundamental, y es que los grandes problemas no se solucionan de la noche a la mañana, sino de forma meditada y muy elaborada, poniendo pilares que sostengan un gran futuro. Estos pilares no estan hechos de hormigón, sino de niños y jóvenes que hay que cuidar para que sean fuertes y seguros, ya que van a llevar todo el peso de este país dentro de unos años; por esto es tan importante el papel de los educadores y de los propios padres, pues son los encargados de vigilar el camino y de hacerlo fácil de recorrer.

Hagamos, en fin, un país donde el odio y la intolerancia no exista, que el amor y la amistad sirvan de ejemplo para el resto del mundo.

Colaboración del padre de un alumno en el periódico de S.A.M en Marzo de 1994
Francisco García Vilches