Síndrome de Fatiga Crónica: grados
Se consideran tres grados en el SFC, son los siguientes:
Leve: el enfermo es capaz de cuidar de sí mismo, pero puede necesitar días de baja laboral para descansar.
Moderada: es posible que el enfermo tenga movilidad reducida y sus síntomas pueden variar; es posible que también vea perturbados sus patrones de sueño y tenga necesidad de dormir durante la tarde.
Severa: el enfermo es capaz de llevar a cabo las tareas diarias mínimas, como lavarse los dientes, pero su movilidad de ha visto notablemente disminuida. También aparecen dificultades para concentrarse.
Por suerte la mayoría de los casos de síndrome de fatiga crónica son leves o moderados, pero hasta una de cada cuatro personas con SFC experimenta síntomas graves.
Síndrome de Fatiga Crónica: síntomas
El síntoma principal del SFC es el cansancio extremo. La enfermedad se diagnostica cuando este cansancio es:
- Es nuevo.
- No tiene motivos aparentes.
- Dura al menos seis meses.
- No se alivia con el reposo en cama.
- Es tan intenso que impide participar en ciertas actividades.
Además del cansancio, el paciente con SFC debe cumplir con al menos cuatro de estos criterios menores:
- Malestar post-esfuerzo (PEM)
- Dolores musculares
- Dolor en articulaciones, pero sin inflamación
- Problemas de memoria o de concentración
- Nodos linfáticos palpables en áreas del cuello o axilas
- Dolores de garganta frecuentes
- Dolores de cabeza
- Sueño no reparador
La enfermedad es muy variable en su duración. Algunos pacientes se recuperan después de un año o dos. Más a menudo, aquellos que se recuperan son más propensos a hacerlo de 3 a 6 años después de su inicio. Otros pueden recuperarse después de una década o más. Sin embargo, para algunos, la enfermedad parece simplemente persistir durante toda la vida
Estos son los grados y síntomas del Síndrome de Fatiga Crónica. Si la información te ha parecido interesante, compártela en las redes sociales.
Tomado de El Blog de la Salud